Descripción de la obra
Toda invitación es una confesión de amor. Si en este caso es a la filosofía, se trata de una invitación a pensar en compañía de aquellos que lo hicieron en los albores de la filosofía griega, que es tanto como decir la filosofía primera.
A lo largo de este camino iniciático necesariamente se han de hacer presentes nombres como Tales de Mileto y Anaximandro, Anaxímenes y Jenófanes, Pitágoras, Heráclito y Parménides, Empédocles, Anaxágoras, Demócrito y Protágoras, y de una manera muy es pecial, el filósofo entre los filósofos: Sócrates.
Comenta el autor de estas páginas que su libro está dirigido a los innumerables amigos secretos que tiene por todas partes la filosofía, y sobre todo a aquellos que aún no saben que están deseando unas migajas precisamente de filosofía. Este deseo se basa, en primer tér mino, en la certeza del placer pro fundo, intenso, que comporta el pensar. Pero, en segundo término, yo soy un alumno de Sócrates y co mo tal sospecho que la filosofía, si fuera intensamente praeticada en el mundo, aportaría a la existencia co lectiva un cambio beneficiosísimo .