Descripción de la obra
Marcel Duchamp está considerado como uno de los artistas más influyentes de este siglo. Sus revolucionarias ideas y su inteligencia iconoclasta se han convertido en una referencia indispensable.
Se ha dicho ya que la vida de Duchamp es su mejor obra de arte, pero ha habido que esperar a la publicación de la monumental biografía de Calvin Tomkins para comprender plenamente la interacción entre su vida y su obra. Nacido en el seno de una familia burguesa, Duchamp decidió seguir el ejemplo de sus dos hermanos mayores y se instaló en París pocos años antes de que el cubismo revolucionara la pintura. A pesar de coincidir con ese hito histórico, a lo largo de su longeva existencia se trazaría siempre su propio e irrepetible camino: una osadísima aventura en la que el arte se concebía, ante todo, como una cosa mentale, en el espíritu de Leonardo da Vinci. Fue Duchamp quien, de una manera más radical que nadie, planteó que el arte debía tener una realidad propia y abandonar la mera imitación. Duchamp quiso siempre colocar el arte al servicio de la mente y fue precisamente ese deseo -espoleado por su particular uso del lenguaje, el azar, la óptica, las películas y demás técnicas metavisuales y, por encima de todo, por sus célebres ready mades- lo que socavó sigilosamente quinientos años de arte occidental hasta transformarlo por completo.
Son muchos los libros que se han escrito acerca de Duchamp, pero la biografía de Tomkins resistirá el paso de los años como la definitiva. Un texto soberbiamente escrito que nos revela el humor del artista, su originalidad, su poder de seducción, sus aventuras amorosas y su influencia sobre personalidades legen darias que le admiraban con devoción. Con sus más de cien reproducciones y fotografías poco conocidas, cautivará a todos los interesados en el arte y la cultura de nuestro tiempo.