Descripción de la obra
España está hoy día integrada en la mayoría de las organizaciones económicas internacionales (OEI) de ámbito mundial y en otras muchas de carácter regional o sectorial. Es más, la presencia española en estos organismos y, en general, en los foros internacionales más relevantes, tiende a ser cada vez más intensa y activa, como sin duda corresponde a la creciente importancia política y económica de nuestro país en las relaciones internacionales. Por otra parte, las considerables transformaciones políticas y económicas que ha experimentado el mundo en los últimos diez a quince años han supuesto importantes modificaciones en la estructura, objetivos y funcionamiento de muchas de las OEI existentes, la desaparición de otras, y la creación de nuevas organizaciones, algunas de ellas tan importantes como la Organización Mundial del Comercio (OMC), sin olvidar tampoco el auge vertiginoso de la influencia de las organizaciones no gubernamentales (ONG).
En España, en general, y pese a una creciente atención de los medios de comunicación y autoridades públicas, sigue existiendo bastante desconocimiento acerca de los objetivos y funcionamiento de las OEI. Este Diccionario, que ahora alcanza su tercera edición, aspira a contribuir al mejor conocimiento por parte de la empresa, de los profesionales y estudiosos del comercio y de las relaciones internacionales, y de la propia Administración Pública, de la realidad actual de estas importantes instituciones multilaterales, así como de las oportunidades de negocio que ofrecen y del papel que España, cada día más, está llamada a desempeñar en ellas.
Al margen de consideraciones de tipo histórico, político o de prestigio que puedan aconsejar una mayor o menor contribución de un país a los fondos o actividades de una organización determinada, los gobiernos y empresas de los países participantes suelen valorar el rendimiento de su pertenencia a una organización económica internacional en términos de los resultados económicos o comerciales obtenidos. No en balde manejan las OEI un impresionante volumen de recursos financieros, procedentes en general de suscripciones de capital, cuotas y donaciones de sus miembros, de emisiones de empréstitos en los mercados de capitales, o de los beneficios que genera su propia actividad. En el desempeño ordinario de sus funciones, las OEI crean numerosas oportunidades de negocio. Desde este punto de vista, y pese a ciertos progresos realizados a lo largo de los últimos diez años, lo cierto es que resulta algo desalentador comprobar los escasos resultados alcanzados por España en este campo. Si se comparan los pagos por contribuciones y los ingresos por contratos de todo tipo financiados por estas organizaciones, se advierte que el rendimiento comercial de las aportaciones españolas a los principales organismos multilaterales de ayuda al desarrollo es muy modesto, y que la tasa de retorno española se halla en general muy por debajo de la de los restantes países industrializados en la misma situación.
Por otra parte, qué duda cabe que el interés de estas organizaciones no se limita exclusivamente a la posible participación de empresas españolas en obras, proyectos o contratos de suministros por ellas financiados. La gran variedad de sus áreas de actuación, desde la corrección de desequilibrios regionales hasta la integración económica, pasando por el diseño de políticas industriales conjuntas o de acuerdos sobre productos, implica, en estos tiempos de creciente interdependencia e internacionalización de las economías, que todo país que desee obtener el mayor beneficio posible de la cooperación internacional sepa aprovechar plenamente su participación en los organismos a los que pertenece.
Esta tercera edición, refundida y ampliada, ofrece una definición rigurosa y detallada de las características y objetivos de cerca de 900 OEI, además de diversas voces y conceptos afines, prestando como es lógico mayor atención a los principales organismos, pero sin descuidar aquellos otros de finalidades múltiples o no estrictamente económicas pero que, pese a ello, tienen de forma indirecta alguna incidencia en la actividad económica internacional. Cada entrada del Diccionario incluye la dirección completa del organismo tratado (incluido correo electrónico y sitio Web, de haberlo), además de su denominación oficial (con siglas incluidas) en español, inglés y francés, y cuando procede, también la lista de sus miembros y uno o más cuadros estadísticos acerca de sus actividades. El libro incluye asimismo un completo y práctico glosario de siglas, dos relaciones de equivalencias de denominaciones de las OEI (inglés-español y francés-español), y un directorio de sitios Web, facilitando de este modo la búsqueda de una organización cualquiera. Un índice temático permite la localización de OEI a través de una serie de conceptos relevantes, no necesariamente presentes en la denominación misma de los organismos que tienen competencias al respecto. La sección de anexos recoge diversa documentación oficial acerca de algunas de las principales OEI (organigramas, direcciones, normativas para licitaciones públicas o adquisiciones con créditos y préstamos de las mismas, por ejemplo), de indudable utilidad práctica. El CD-ROM, como es lógico, no sólo recoge en su integridad todos los textos y datos incluidos en el libro, sino además una considerable cantidad de información adicional sobre las OEI, enriqueciendo con sus posibilidades interactivas el valor añadido de la obra.
