Descripción de la obra
En 2001, el periodista Arcadi Espada remontó el Ebro para levantar acta de un paisaje. Sus crónicas arrancan en el fangal del delta y concluyen, después de 31 días de escritura a contracorriente, en el pico de los Tres Mares. Así, y al igual que cualquier noticia que se precie, la narración empieza por su presunto desenlace. Hay otro rasgo que remite al periodismo en estado puro: a Espada le interesan los sucesos antes que las descripciones mortecinas. No es de extrañar, por tanto, que su primordial ocupación sean los hombres y sus insólitas empresas: por Ebro/Orbe desfilan, como en una entusiástica galería humana, el escritor Juan Sebastián Arbó, que cada verano cruzaba a nado la bahía dels Alfacs; el biólogo alemán Roland Lorkowski, que en la primavera de 1974 llegó al Ebro con 32 crías de siluro en la maleta; el ingeniero Antoni Coch, artífice del Plan Hidrológico del Gobierno Aznar.
Cinco años después de aquella peripecia vital y literaria, y todavía azuzado por su querencia a la simetría, el viajero vuelve sus pasos hacia Levante para encararse con el reverso del río. Primera etapa: el canal de Cherta, kilómetro cero de una camino atravesado por las voces del cocinero Quique Dacosta, acreditada eminencia en arroces; el escultor Miquel Navarro, simbiótico hacedor de insectos y ciudades; el sociólogo José Miguel Iribas, instructor de uso de Benidorm.
Cuaderno de viajes, recetario ilustrado, diario éxtimo Ebro/Orbe constituye un fresco audaz y temperamental de la España de nuestros días; una geniuda crónica-río que se desenvuelve con idéntico aplomo en la quietud y en la turbulencia.
Las fotografías de Juan Peiró, en las antípodas de la mera ilustración, conforman una osada réplica a la escritura de Espada e insinúan un fructífero diálogo entre texto e imagen