Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos, estadísticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Si deseas más información puedes obtenerla haciendo clic en nuestra Política de Cookies. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar” o personalizar tu elección haciendo clic en CONFIGURAR O RECHAZAR SU USO.


Imagen no disponible

Grandes Líricos del Renacimiento Español, Los "Poesía Completa"


Autores: BOSCAN, JUAN; GARCILASO DE LA VEGA; FRAY LUIS DE LEON; SAN JUAN DE LA CRUZ; HERRERA, FERNANDO DE.

Editorial: Ediciones Catedra

Colección: Bibliotheca Avrea

Idioma: Castellano

Tematica: Poesía.

Estado: Consultar disponibilidad

Precio: 47.95€


ISBN: 978-84-376-2662-8

Edición nº 1

Año: Abr 2010

Nº de páginas: 1792

Encuadernación: Tapa Dura / Cartoné

Dimensiones: 15 x 22 cm

Descripción de la obra


Cuando murió en 1458, el marqués de Santillana llevaba peleando veinte años con sus cuarenta y dos Sonetos fechos al itálico modo , sin que apenas alguno consiguiera salir enderezado y airoso. Setenta y ocho años más tarde, cuando murió Garcilaso, dejaba cuarenta sonetos que pueden figurar sin rubor en la más exigente antología.¿Qué había ocurrido entre 1458 y 1536? Pedro Salinas lo describe como un hermoso cuento . El embajador veneciano Andrea Navagero, perfecto ejemplo del caballero del Renacimiento , coincidió en Granada con Boscán. Hablaron. Al español -dice Salinas-, el veneciano le parecía una especie de semidiós o de oráculo. Y Navagero aconsejó a Boscán que escribiera sonetos y otros poemas "al itálico modo" pero en castellano, lengua que consi deraba muy adecuada para esas formas. Nada más: una conversación entre los mirtos de Granada, un consejo, es decir, una semilla sembrada en la mente de un poeta español. ... Garcilaso era un poeta toledano.Los grandes líricos del Renacimiento español es el cofre que guarda el mapa de aquel hermoso cuento . Boscán, amigo tenaz, voluntarioso poeta; Garcilaso, amado de las musas y los dioses, tal vez por eso destinado a morir joven; Luis de León, sosegado y oyente privilegiado de la música de las esferas; Juan de la Cruz, de quien dijo Menéndez Pelayo que por allí había pasado el espíritu de Dios hermoseándolo todo ; y, en fin, Herrera, a quien sus coetáneos dieron el sobrenombre de Divino: ellos fueron protagonistas de esa revolución que iba a determinar definitivamente el curso de la poesía en lengua española .

Proyecto financiado por la Dirección General del Libro y Fomento de la Lectura, Ministerio de Cultura y Deporte» y «Financiado por la Unión Europea-Next Generation EU