Descripción de la obra
Concha les dice a sus alumnos, en clase: El río Negro es la prolongación de mi arteria aorta. Por eso, cualquier residuo tóxico que viertan a sus aguas daña tanto mi salud como la suya .
No es la descendiente de un jefe indio, sino una mujer nacida a mediados del siglo XX que, con 15 años, traspasa sola la línea verde del robledal, en las tierras zamoranas de Carballeda, para adentrarse en el entorno del lobo. Busca su identidad y comparte sueños y miedos con los habitantes de montes primitivos y de aguas salvajes y claras.
Al coincidir la pérdida de su madre con una amenaza de ceguera funcional, Concha ve desmoronarse su vida afectiva y profesional.
Durante un breve viaje al pueblo para hacer frente a la herencia recibida, en compañía de Luis, su marido, la protagonista de la novela siente, una vez más, el abrazo del bosque, y se somete a la diálisis emocional de las aguas del río. Revitalizada por el reencuentro, decide repasar su vida bajo el dominio del río Negro, en busca de claves que permitan que se reinvente.