Descripción de la obra
Desde la CELe se explica que el Romancero es el capítulo señero de la tradición oral hispana. León es una de las provincias que lo ha conservado con mayor riqueza hasta el albor del siglo XXI. Su importancia en la sociedad leonesa es tal que era el protagonista de uno de los símbolos culturales de esta tierra, el filandón, también llamado hila, hilorio, serano o velada .
El libro se divide en tres bloques; el primero está enfocado a contextualizar el fenómeno del romancero, los trabajos precedentes sobre el tema, las ocasiones en que aparecía el romancero en los pueblos leoneses y una crónica de la encuesta. El segundo, subdividido en 26 apartados, clasifica los romances basándose en su temática. Cada texto va acompañado de los datos referentes al transmisor, recopilador, fecha y lugar de grabación. Finalmente el tercero está compuesto por los índices, entre los que destaca una tabla de los romances con su número IGR, un listado de los informantes que los han transmitido y un mapa, obra de José Cortizo, que señala las localidades de origen de las diferentes versiones.
Tres centenares de romances
La recogida de romances en tierras leonesas comenzó a finales de siglo XIX y tuvo dos momentos cruciales, los primeros años del siglo XX, con Ramón Menéndez Pidal, María Goyri y Josefina Sela y las décadas de 1970 y 1980, con las campañas dirigidas por Diego Catalán. Otros investigadores que han colaborado en la compilación de romances en estos últimos decenios han sido José Luis Puerto, Miguel Manzano o Joaquín Díaz. A pesar de todo lo recogido, León sigue dando frutos en este campo, sorprendiendo con textos, variantes y melodías.
David Álvarez Cárcamo (Vitoria-Gasteiz, 1982), profesor de Geografía e Historia en el Instituto El Señor de Bembibre (Bembibre), ha recorrido los pueblos leoneses desde 1999 recogiendo diversas manifestaciones de la cultura tradicional. De su archivo ha seleccionado casi tres centenares de romances que, junto con algunos cedidos por investigadores como José Manuel Fraile Gil, conforman una colección de doscientos noventa y seis textos que engloban todos los apartados en los que se clasifican los romances.
El libro va acompañado por un CD mp3 en el que se incluyen los doscientos noventa y seis romances cantados o recitados por las mujeres y hombres que se los han transmitido al autor, y cuenta también con varias imágenes de algunos de los informantes y de detalles encontrados a lo largo de la provincia por el autor. Finalmente hay que apuntar que la totalidad de los audios que integran en el CD serán volcados en la página web de la CELe.