Descripción de la obra
Si algo tiene este mundo revoltoso es que, casi a diario, se pone a prueba nuestra paciencia.
Dime, amiga, ¿qué te aflige? ¿El trabajo? ¿El amor? ¡No!
Lo que te aflige te lo digo yo: que te llenas la vida de problemas que no son tuyos, que te sientes culpable por lo que no te corresponde, que no se entiende cómo una persona puede ser un completo desastre y, a la vez, volverse loca intentando controlarlo todo, y que eres demasiado educada para mandar a más de uno a la mierda.
Te afliges tú sola. Reconócemelo y no me mientas, que te conozco.
Pero tranquila, que para eso estamos aquí: vamos a empezar la limpieza de primavera. La de invierno. La de veroño. No sé: una limpieza. La madre de todas las limpiezas. Vamos a limpiar tu vida de todo lo que te quita paz mental. El faltoso de tu cuñao, la borde de tu prima, el capullo de tu jefe y, si me apuras, hasta todos los ligues del Follinder de tu amiga: empecemos a quitar lo que sobra y gestionar mejor lo que queda.
Eso sí: antes de meternos en materia, échale un ojo a la despensa y asegúrate de tener mucho, mucho chocolate.